Como ya amenacé la semana pasada, estoy recuperando material arqueológico para compartir con ustedes. Lean entonces la correspondiente advertencia, que les hice en el post de la semana pasada, y vean esto que escribí a los 20 años.
Caminando
Son las cinco, está nublado. La calle, desierta por los primeros fríos del último mes de otoño. Yo camino.
Camino por calles que anduvimos, y regusto en cada paso los recuerdos.
Las manos juntas, las palabras, las sonrisas, la ilusión, vienen en bandadas a mi alma, mientras camino sola.
El gris de la tarde me adormece el corazón y alimenta mi nostalgia: ¿Dónde estás? ¿Qué hacés ahora?
¿Te pesa la distancia como a mí? ¿Te entristecen las nubes que a mí me han oscurecido la mirada?
Son las cinco, está nublado y yo camino sola por las calles que una vez nos conocieron juntos y ya no recorreremos los dos...
Caminando
Son las cinco, está nublado. La calle, desierta por los primeros fríos del último mes de otoño. Yo camino.
Camino por calles que anduvimos, y regusto en cada paso los recuerdos.
Las manos juntas, las palabras, las sonrisas, la ilusión, vienen en bandadas a mi alma, mientras camino sola.
El gris de la tarde me adormece el corazón y alimenta mi nostalgia: ¿Dónde estás? ¿Qué hacés ahora?
¿Te pesa la distancia como a mí? ¿Te entristecen las nubes que a mí me han oscurecido la mirada?
Son las cinco, está nublado y yo camino sola por las calles que una vez nos conocieron juntos y ya no recorreremos los dos...

Para que nunca los encuentren caminando solos por el mundo, les recomiendo la adopción de Silvia, nuestra linda gordita de caramelo. Nos vemos el sábado. Graciela
4 comentarios:
Estas nostalgias de un otoño que se fue, Graciela, me trajeron a la mente los finales de tres películas: «Angustia de un querer», de Henry King (con William Holden y Jennifer Jones), «El nombre de la rosa», de Jean-Jacques Annaud (con Sean Connery, Christian Slater y Valentina Vargas), y «300», de Zack Snyder (con Gerard Butler y Lena Headey).
«¿Qué hago si no vuelves?», preguntó Gorgo a su esposo. «Cásate con un buen hombre y ten más hijos», le respondió el rey Leónidas (justo antes de partir hacia la Batalla de las Termópilas).
Nota: Todos los perros van al Cielo.
¡¡¡Carlos Alberto!!! ¡¡¡ Qué gusto volver a tener noticias tuyas!!!! Un enorme abrazo, Graciela
Pues sí, concuerdo con Carlos... es un final de película... y de película triste...
"Nunca es triste la verdad, lo que no tiene es remedio", dice Serrat. Y tiene razón, Terox, ¿o no?
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