¡Y SE VIENE NOMÁS LA PRIMAVERA!

Con motivo de la primavera que se avecina, he seleccionado esta confesión de prontuario, ya que tiene que ver tanto con la estación del año, como con la primavera de mi vida.  

Por esa razón no la incluyo en la etiqueta correspondiente a Calendar Lady, aunque bien podría hacerlo. Efectivamente, esto que les presento ahora fue escrito en 1966, cuando yo tenía 14 añitos, como redacción para la escuela secundaria. La consigna era, lo recuerdo bien, escribir una composición (como entonces se las llamaba) con el título Azul, y ésta fue la que yo escribí. 

La razón por la cual aún la conservo, es bien sabrosa, de modo que será tema del próximo post. Hoy, para no hacerlo tan largo, va solamente la redacción. Por favor léanla pensando en que la que la escribió tenía 14 zonzos añitos, no esperen demasiado entonces.  

AZUL  

Lejos, allá donde la mañana se hace cielo, se dibuja grácil, su silueta, llena de la misma alegría inmensa del horizonte. Esbelta y gentil, con la risa de campanas girando en el azul, y con el sol tras su frente, la iglesia se adormece, cansada de la luz y de la brisa. 

Hay un revuelo de pájaros que a la distancia son sólo puntos que se mueven locamente. También hay algo de sereno y firme en su pacífico estar señalando siempre el espacio infinito, tan azul y misterioso.  

Algún árbol tiende sus ramas llenas de dones, sintiéndose pequeño, junto al sublime gigante; pero él desde su altura es humilde y natural. La brisa borra algo del sonido, tan extrañamente cercano que la torre envía como un mensaje de fe hacia el mundo. 

Un gozoso azul se extiende, imponiendo silencio al verde que sube de la tierra briosa. Son colores brillantes los que chocan y se mezclan en la mañana plena de vida. 

¡Azul cielo! ¡mañana azul! Canción y ronda de azules que rodean a las casas y la iglesia del paisaje feliz que hoy he soñado. 

Como este post es bastante festivo, porque se aproxima la primavera, pese al frío paraca que sentimos, les tengo buenas noticias: Rex, se reencontró con su familia. Panchita fue adoptada. Barti sigue esperando, pero para que no se achiquen los posibles adoptantes, acá pueden ver un video de lo bien que se maneja solito. No da ningún trabajo. Pasen y vean, señores Mica, la cocker de la foto, tiene una historia que contar, y una nueva familia para mostrarles Negrosolo, el dulce caramelo de la otra foto, a su vez, viene a cobrar el precio de tantas buenas noticias: después de todo nada es gratis en este mundo, y él necesita una familia, que además seguramente lo está necesitando a él. 

Bueno, chicos, a prepararse para los primaverales festejos, y a volver el otro sábado por acá, a contar cómo les fue. Un beso a todos. Graciela.

Espérenme con la noticia de que le dieron hogar a un perrito o gatito de la calle, ¿les gusta la idea? P.S.: Recuerden que cualquier cosa que quieran usar de este blog debe incluir la  mención de la fuente, porque todo en él tiene protección de propiedad intelectual.