Bartimeo, Federico Alfonso y Elvira Inés, los ángeles del blog.

sábado, 13 de febrero de 2010

¡¡¡LOS NIÑOS, SIEMPRE LOS NIÑOS!!!

Esta anécdota data de mi adolescencia, cuando viajé por primera vez a Jujuy, a conocer a algunos parientes, entre ellos un sobrino en segundo grado, de nombre Francisquito, hoy un responsable ingeniero, pero en ese momento, poco menos que la piel de Judas. 
Este niño terrible tendría por entonces unos 7 años, y ya contaba con mil anécdotas en su haber. 
Una de mis favoritas es el diálogo que tuvo lugar, "según las crónicas de la época" (la cuento como me la contaron esa vez) durante un desayuno. 
Mis familiares son muy religiosos (y sí, alguna oveja negra siempre hay en cada familia) y por ello, dan a la comida, y particularmente al pan, nombres como "la gracia de Dios", "el Cuerpo del Señor" o "la cara de Cristo". 
Lo cierto es que esa mañana, Francisquito estaba jugando con una tostada y eso le valió el reto de su madre, quien dijo: 
-¡Francisquito! Es muy feo que estés jugando con "la cara de Cristo"... 
Y él contestó, con una lógica insuperable: 
 - ¡¡¡Mucho peor hiciste vos, que se la quemaste!!! 
Tierno, ¿verdad? Como tierna es Panchita, que sigue en espera de una feliz adopción.

Un beso y hasta el próximo sábado. Espérenme con la noticia de que le dieron hogar a un perrito o gatito de la calle, ¿les gusta la idea? Graciela.
P.S.: Recuerden que cualquier cosa que quieran usar de este blog debe incluir la  mención de la fuente, porque todo en él tiene protección de propiedad intelectual.

6 comentarios:

Terox dijo...

Con razón dicen que los borrachos y los niños... ¿tienden a vomitar? digo, siempre dicen la verdad... apuesto que los perros también lo harían si supieran hablar...

Saludos

Graciela L Arguello dijo...

Tal cual, Terox tal cual Un beso Graciela

Anónimo dijo...

Muy bueno.Los grandes decimos cosas que los niños nos refutan con contestaciones simples y lógicas.Recuerdo a mi madre,que luego de bañado y cambiado,le pedía permiso para ir a jugar a la pelota.Si andá,me decía,pero no te ensucies.Como iba a jugar sin ensuciarme.Doble discurso,no?.Un saludo amiga.

Graciela L Arguello dijo...

Hola, rumbofijo , me recordaste aquel clásico de la madre que advierte a su hijo:- "Podés ir a nadar, pero tené cuidado, porque si te llegás a ahogar, en cuanto vuelvas, te mato"

Un beso Graciela

Marcelo Guerrero dijo...

Hola!
Me gusta mucho tu blog..
Te invito a pasar por el mio y tomar unos mates..
Un abrazo!

Graciela L Arguello dijo...

Bienvenido al blog Esteban que sea un café, no tomo mate, ya estaré visitando tu blog Graciela